¿Qué es para ti la Inteligencia Emocional?, ¿qué impacto tiene en el desempeño de un colaborador? O ¿qué rol juega en el ámbito laboral?… ¿Por qué estas preguntas?, porque como Consultora, hablar de Inteligencia Emocional, su impacto y como evaluarla en el ámbito laboral no es una de las solicitudes más frecuentes. Regularmente, los clientes suelen recurrir a nosotros por temas relacionados con el desarrollo del liderazgo, la identificación de altos potenciales, el desarrollo de equipos; entre otros temas. Sin embargo, algo que encontramos en el noventa por ciento de esas mismas solicitudes tiene que ver con el desarrollo de habilidades intrapersonales e interpersonales, que es justo el rol que juega la Inteligencia Emocional (EQ).
Los colaboradores más exitosos, o aquellos que llegan a destacar en las organizaciones no siempre son aquellos que cuentan con más títulos académicos. Aunque, este aspecto es importante y en particular esencial para algunas áreas, las capacidades de relacionamiento y autogestión son características que me atrevería a decir que todos los empleadores buscan porque tienen una estrecha relación con la habilidad de la persona para colaborar efectivamente y/o liderar a otros.
Las Inteligencia Emocional podemos definirla como la capacidad para identificar, procesar y administrar tanto las emociones propias como las de los otros para poder interactuar de forma satisfactoria. Por lo tanto, la inteligencia emocional es determinada por la personalidad (Chamorro-Premuzic & Furnham, 2010).
La EQ es una consecuencia de la personalidad, por lo que es posible evaluarla a través de los inventarios de personalidad Hogan HPI y HDS. Al evaluar la EQ, tienes los datos necesarios para impulsar el desarrollo de tus colaboradores a través de la autoconsciencia estratégica sobre sus fortalezas y oportunidades para crear, mantener y acrecentar sus relaciones con quienes laboran, con sus clientes internos o externos y con cualquier persona con la que colaboren.
Aunque la Inteligencia Emocional se puso en boga hace unos veinte años, Hogan ya analizaba la EQ desde antes, por lo que hace aproximadamente diez años diseñó un reporte que midiera la EQ. Este reporte te ayuda a identificar el estilo de relación y la comunicación que tus colaboradores muestran. La investigación que respalda el Reporte Hogan EQ cuenta con la base de más de 40 años de investigación y te brinda los resultados de una forma sencilla y resumida en seis competencias emocionales al evaluar el grado en el cual una persona muestra:
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- Conciencia – estar en contacto con sus propias emociones.
- Detección – tener consciencia de las emociones y pensamientos de los demás.
- Regulación – la capacidad de mantener estados emocionales positivos.
- Influencia – la capacidad de afectar el estado de ánimo y el comportamiento de los demás.
- Expresión – la habilidad de comunicar estados emocionales a otros.
- Empatía – percibir lo que otros están sintiendo.
El reporte te brinda una interpretación de estas seis competencias con relación al liderazgo, el trabajo en equipo y la empleabilidad, así como, aspectos clave a indagar acorde al resultado del evaluado. Apoyarte de este reporte facilitará tu proceso de evaluación y toma de decisiones.
La Inteligencia Emocional impacta en el éxito profesional de las personas, especialmente cuando las posiciones requieren mayor interacción social.
Contar con una buena EQ es tan importante como factores relacionados con conocimiento del negocio, experiencia, capacidad creativa o el interés por retos y resultados, por lo tanto; la próxima vez que tengas que tomar decisiones sobre tu personal, especialmente si son relacionadas a temas de liderazgo, no olvides incluir la evaluación de Inteligencia Emocional en el proceso. Si quieres más información o apoyo, no dudes en contactarnos.
